Vivir en pisos de alquiler es algo muy normal y frecuente en la actualidad. Muchas personas se decantan por la opción de alquilar un piso o una casa para vivir en lugar de invertir en la compra de una propiedad.
Suena menos arriesgado vivir en una propiedad de renta que lanzarse a la compra de una vivienda, y para muchos, ya sea por las condiciones económicas o por cuestiones de ritmo de vida, etc. no es fácil tomar la decisión de comprometerse a adquirir su propia vivienda.
Está claro que todos queremos sentirnos como en casa aunque vivamos en un piso o casa que oficialmente no sea parte de nuestros bienes. Y eso significa estar a gusto con la decoración, la distribución de las estancias, el clima interior, etc.
En verano la carga térmica de un edificio puede hacer que una estancia alcance temperaturas realmente altas, al igual que en invierno puede pasar lo contrario, y esto lleva a cuestionarse si podemos instalar un aire acondicionado en un piso de alquiler.
Para instalar un aire acondicionado en un piso de alquiler
Instalar un equipo de aire acondicionado en un piso de alquiler es posible siempre y cuando en el contrato no figure ninguna cláusula que indique lo contrario.
A parte de las condiciones indicadas en el contrato es indispensable aclarar algunos factores que son determinantes para la aprobación del proyecto:
- Hablar con los propietarios del piso y exponerles la idea: Es probable que independientemente de lo que dicte el contrato, el propietario acceda a dar el permiso para llevar a cabo la instalación y además habría que determinar unas pautas para concretar las especificaciones del proyecto, como quién se encargará de cubrir los gastos de la máquina, de la instalación, de las posibles futuras reparaciones, etc.
- Comprobar los Estatutos de la comunidad de vecinos: En ellos viene recogida toda la información relevante para asegurarse de si es o no posible llevar a cabo la instalación.
- Consultar el reglamento correspondiente en el Ayuntamiento pertinente: Para asegurarse de no incumplir ninguna normativa que pueda traernos problemas.
Instalar el aire sin permiso
Otra opción sería recurrir a la instalación saltándose los pasos nombrados previamente y efectuarla sin los permisos necesarios.
Es una opción que sonaría estupendamente de no ser por las consecuencias que esto podría provocar.
La forma de pensar que apoya la filosofía de hacer lo que queramos en nuestro espacio podría derivar en situaciones conflictivas, tanto a nivel social como a nivel legal.
Seguramente exista un Seguro de impago que proteja a los dueños frente a situaciones de este tipo, y de no existir, igualmente los propietarios podrían tomar la vía legal para encargarse de resolver el problema.
Llegados a ese punto, los dueños tendrían varias opciones:
- Exigir la reversión de las modificaciones: Estarían en el derecho de ordenar la vuelta al estado inicial de los cambios realizados para la instalación del aire acondicionado y además de ello, podrían solicitar una compensación económica.
- Aceptar los cambios efectuados: Si ellos decidieran mantener las modificaciones y conservar la máquina, perderían el derecho a indemnización y el proyecto se consideraría una obra a beneficio de la vivienda.
Por otro lado, la Junta de propietarios también tendría el derecho de demandar la obra y la Ley de Propiedad Horizontal apoyaría a la comunidad de vecinos así como a la persona a cargo de la presidencia del edificio, quién podría ordenar el cese de la instalación e iniciar acciones judiciales contra los responsables de la negligencia.
En definitiva, podemos concluir que instalar un aire acondicionado sin permiso en un piso de alquiler no es recomendable en absoluto, siempre es aconsejable seguir el camino legal para evitar conflictos y repercusiones que podrían afectar de manera notable.